Hoy en el blog hablamos sobre colores de cabello.
Son muchas las personas que acuden a nuestro salón con fotografías de cabellos, habitualmente técnicas de color, diciendo: “yo lo quiero así”.
En muchas ocasiones se puede hacer sin problema, pero en muchas otras no es posible porque la clienta viene con un color que tiene muchos pigmentos, ya sean rojos, violetas, cobrizos,cortes…, y tienen falta de hidratación.

Nuestra forma de trabajar es siempre poniendo en primer lugar el cabello a salvo, sin riesgo a dañarlo. Durante este año los colores más demandados han sido los fríos, como los rubios nórdicos y los rubios beige, con técnica balayage.
Ese tipo de colores llevan otro añadido que es el de peinarse. De nada sirve que realicemos una técnica de color degradada si después no se le va a dedicar a esa melena un tiempo para peinarla. Cuando nos piden ese tipo de trabajos aconsejamos un pulido del cabello, ya sea un alisado o realizar algún tipo de onda, y , si no es posible, una coleta, pero siempre unos minutos de dedicación para ese trabajo, porque de no hacerlo, no se verá la realidad del color.

Para aquellas personas que no tienen tiempo para arreglarse la melena en casa o simplemente no les gusta hacerlo, os guiaremos en otros trabajos técnicos, ya sea color o en algún tipo de moldeador, siempre hay más elecciones. No tenemos que llevar todos lo mismo, ya que cada uno de nosotros tenemos un cabello y un ritmo de vida.
En este post os dejamos un trabajo realizado en el salón. Una de de las fotografías es con la melena pulida y la otra, es de la misma clienta sin tiempo para peinarse. ¿Qué os parece? Aquí veréis claramente la importancia de peinar estos trabajos.
